Según el diccionario francés Larousse, la confianza se define como “la seguridad, valentía o coraje que surge de la conciencia de su propio valor o suerte”. Y según el contexto, “el sentimiento de alguien que confía plenamente en otra persona o en algo”. En el diccionario de la RAE, tenemos otras versiones como “esperanza firme, seguridad, presunción y ánimo”.

Lo que me salta a la vista es la ambivalencia de las definiciones con una parte de afirmación (seguridad, consciencia de su valor, presunción) y la parte más étera de esperanza, confiar en algo. Además aparecen los motores de pasar a la acción que son el coraje y el ánimo. Entonces con confianza, tienes consciencia de tu valor y te da ánimo para avanzar. Esa es mi interpretación de las definiciones del diccionario.

Mientras tanto en Francia, unos pedágogos han pedido la definición de diferentes personas de su entorno (niños, adolescentes, estudiantes, adultos) con la pregunta “Para ti, ¿qué es la confianza en uno mismo?” y aquí están algunas de las respuestas.

Tener confianza en uno mismo puede ser:

• No dudar de que las decisiones que tomamos sean las correctas para nosotros.
• Sentirse bien consigo mismo y con la sociedad.
• Creer que lo que hacemos está bien.
• Estar seguro de uno mismo.
• No tener miedo a la mirada de los demás.
• Atreverse a hacer cosas.
• Tener cierto optimismo en sus acciones.
• Creer en uno mismo.
• Pensar que soy capaz de alcanzar un objetivo.

Por lo tanto, en la opinión general (sin ningun estudio científico) tener confianza en uno mismo es un sentimiento de seguridad. Pero cada persona puede tener su propia definición de la confianza, según su experiencia, su percepción y sus valores. La confianza en uno mismo es una noción muy subjetiva y muy presente en nuestra vida diaria. Quizás tienes otra definición y me la puedes compartir (en redes sociales o por email).

⚠️ utilizo confianza en uno mismo y autoconfianza como sinónimos.

Tener confianza en uno mismo y tener autoestima pueden parecer muy similares, aunque estos dos sentimientos están relacionados, no son idénticos.

La autoconfianza está relacionada con la evaluación de nuestras habilidades personales mientras la autoestima, es decir la imagen que tenemos de nosotros mismos, se acerca más al valor que nos damos a nosotros mismos. Así mismo tener autoestima nos permite ir bien en todos los ámbitos de nuestra vida.

Por ejemplo si un adulto tiene poco éxito en un aspecto de su vida, puede afectar a su autoconfianza si considera que este aspecto es importante (ej: no se me dan bien los idiomas) Pero si considera que no es muy relevante, no afectará tanto su autoestima (ej: y no pasa nada, tengo otras competencias → autoestima alta ; por lo tanto no valgo para nada → autoestima baja).

Resumen :

¿Consideras que tener autoestima es un factor de éxito en tu aprendizaje y tus resultados (escolares o profesionales)? Apostamos a que tu respuesta es “sí”. Sin embargo, las investigaciones en educación son un poco menos claras, ya que la noción de autoestima es muy compleja. Los resultados resaltan más bien la importancia de la confianza de los niños en sus capacidades para aprender cosas nuevas.

La autoconfianza en el aprendizaje varía, por supuesto, de un ámbito a otro, de una asignatura a otra. Puedes ser excelente con una guitarra eléctrica, pero no saber cómo hacer un pastel. De la misma manera, puedes destacar en matemáticas, pero no tener éxito hablando inglés.

Esta diferencia de confianza entre los ámbitos tiene dos consecuencias: empujarte aún más en el ámbito en el que tienes confianza (la guitarra) frenarte en la inversión que podrías haber tenido en el que no tienes éxito (el pastel).

Así, si eres bueno en matemáticas: elegirás tus estudios y seguramente tu futura profesión relacionados con habilidades cercanas a las matemáticas. Incluso puedes querer enfrentarte a desafíos en este ámbito.

Mientras que si no logras buenos resultados o no entiendes, tu confianza y motivación en esta disciplina se desvanecen. Elegirás así tus estudios de tal manera que encuentres la menor cantidad posible de matemáticas. Este enfoque (más o menso consciente) te permite mantener una buena autoestima alejándote de las dificultades y protegiéndote de los fracasos.

A la edad adulta también intentamos proteger nuestra autoestima haciendo actividades que se nos dan bien. Sin embargo, aprender francés supone un reto que muchos alumnos enfrentan diciendo que eso no es su area de predilección, que no le entra, no tiene memoria… Tantas frases que demuestran una falta de confianza en este ámbito. Por lo tanto en clase, trabajamos primero la confianza en sí mismo y lanzamos retos con frecuencia para desarrollar esta competencia tan importante en tu vida.

Ahora, una parte es lo que hacemos como profesoras para desarrollar tu autoconfianza, otra cosa son las actividades que puedes hacer tú en casa para tí.

Para desarrollar tu autoconfianza en el aprendizaje, te propongo 5 actividades que puedes probar y adaptar según tus sentimientos y necesidades del momento para tí o para tus hijos.

El objetivo de esta actividad es tomar consciencia de tus competencias, ya que a veces te enfocas solo en lo que no sabes hacer, lo que no has logrado, la última nota o comentario negativo… Necesitarás una bonita hoja de papel (o tu libreta), un lindo bolí y unos 20 minutos sin notificaciones del móvil. Empieza a enumerar todo lo que sabes hacer, lo que eres capaz de hacer. Si lo haces con tu hijo y que es capaz de apuntarlo solo, deja que lo escriba (con las faltas que haga falta), si es pequeño apunta lo que te dice. Si te falta autoconfianza, es probable que te cueste empezar la lista, así que te ayudaré. Cuesta arrancar pero después descubres muchas cosas. No te pongas filtros, escribe todo como viene y ya pondrás orden (o no) luego.

Pistas para empezar (mira solo si no sabes empezar, que no quiero influenciarte):

Encuentra pequeños objetivos para que puedas conocer la satisfacción de tener éxito y ganar gradualmente autoconfianza. Define varios pequeños objetivos que te permitan llegar a un objetivo mayor que sea importante para ti. Si te das directamente un objetivo importante, te llevará tiempo alcanzarlo y podrías desanimarte antes de terminarlo. ¡Y varios pequeños objetivos también significan la satisfacción de tener varios éxitos! Y eso sienta bien 🙂

Por ejemplo: tu hijo debe conocer perfectamente todas las tablas de multiplicar antes de fin de año. Este objetivo da miedo de lo imposible que parece. Sin embargo, podemos cortarlo en peuqeños objetivos : la tabla de 2 esta semana las tablas de 1,2,3,5,10 antes de Halloween De esta manera, si cumple los pequeños objetivos, estará contento y orgulloso de si mismo y poco a poco ganará confianza en este aprendizaje tan impresionante.

Otro ejemplo, quieres aprobar el examen de B1 en junio. Te propongo 3 trimestres en grupo para alcanzar el nivel mientras nos divertimos con los compañeros. Trimestre 1 : repasar los tiempos del pasado y las conjugaciones que ya sabes. Trimestre 2 : añadir el subjunctivo a tus argumentaciones Trimestre 3 : encontrar ideas y estructurar tu redacciones Al final de cada trimestre, nos aseguramos que dominas todo el programa y celebramos. Si quieres empezar una vez el curso empezado, puedes coger clases particulares para ponerte al día del grupo, y entrar después en el grupo con un nivel similar. Confío que así, tendrás más confianza a la hora de hacer tu presentación oral el día del examen y en tus próximas intervenciones en francés más adelante.

La meditación tiene muchos beneficios, y probablemente conozcas algunos de ellos. Al meditar, notarás, entre otras cosas, que mejora tu concentración, que manejas mejor tus emociones y que tu estrés disminuye. Todos estos beneficios son esenciales para ponerte en las mejores condiciones cuando emprendes una actividad o un aprendizaje. Si te sientes bien, alcanzas más éxito, y desarrollas tu confianza.

La pedagogía Montessori se basa en la confianza de uno en sus propias capacidades naturales de desarrollo y aprendizaje. Fuera de las escuelas Montessori, puedes pensar en organizar algunas actividades en casa para tus hijos o participar en las actividades para adultos de la academia. Las actividades Montessori permiten pasar un momento lúdico y agradable para desarrollar cada día un poco más de confianza en sí mismo. Es la base inspiracional de la metodología de la academia. Te pongo aquí unos príncipios y puntos claves de la pedagogía Montessori que hemos adaptado a las clases de francés :

• la libertad (no de hacer cualquier cosa, sino de elegir qué aprender),
• la autodisciplina (somos adultos, nadie te riñe si no haces la redacción, sin embargo quien la hace mejora antes),
• el aprendizaje por la experiencia (con muchas situaciones reales de cpmunicación),
• la actividad individual (itinerario personalizado),
• la educación como una ayuda a la vida (profesoras especializadas en expatriación, laboral, examen…),
• favorecemos la ayuda entre los grupos de edades múltiples (el objetivo es crear grupos unidos sacando provecho a las diferencias entre cada uno),
• las actividades opcionales,
• el respeto del ritmo de cada uno…

Tanto para algunos, pueden ser un motor, tanto para otros es una verdadera fuente de ansiedad y de pérdida de confianza. Si recibes un comentario negativo, pregúntate por qué no funcionó : no habías entendido el tema, hay muchos errores pequeños, has olvidado incluir una información esencial, te has estredado mucho y has perdido tu compostura…

Según tus respuestas, puedes pensar en pequeñas acciones a implementar:

• Pide ayuda si no has entendido.
• No digas que has entendido si no es realmente así
• Trabaja con más concentración: ubícate en un lugar tranquilo sin distracciones.
• Relájate antes de una reunión: los errores o pequeños fracasos pueden ayudarte a progresar.

Cuando hablas de ti, siempre habla positivamente de tus capacidades (o de las de tus hijos). Te propongo unas citas para repetir cada día: están llenas de sentido común y permiten ver la vida de manera positiva. Esto es esencial para tener confianza en uno mismo.

Cuando realices una actividad, ya sea divertida o más escolar, trata de terminarla con una nota positiva, es decir, en la que tengas éxito. Por ejemplo, durante los deberes, reserva la asignatura en la que tiene mejor desempeño y que más le gusta para el final. De esta manera, incluso cuando esté más cansado, el final de las tareas será más fácil y tendrá éxito. Esto permite aumentar la confianza y ponerlo en buenas condiciones para las próximas tareas. A los adultos se les aconseja de “tragar el sapo” primero, es decir empezar el día con la tarea menos agradable (la llamada que pospones desde semanas…) e igualmente de guardar lo mejor (la clase de francés) para la última hora del día 😊


Ahora tú, dime ¿qué haces para desarrollar tu autoconfianza o la de tus hijos? Ahora que tienes más información, ¿vas a probar algunos de estos consejos ? ¿Tienes preguntas o ideas para compartir sobre la confianza en uno mismo? Déjame tus comentarios por email 📧lea@ouimerci.es y te contesto. ¡gracias!